- El tenis competitivo es muy difícil y nunca se vuelve más fácil.
- El tenis se ve mucho más fácil desde afuera de la cancha.
- Perder es una parte integral del tenis. Aun a nivel profesional solo un jugador gana por semana, el resto pierde.
- Si nunca has jugado tenis de competencia, realmente no sabes lo que sucede en la cancha.
- Siempre habrá una crisis que enfrentar: lesiones, derrotas contra jugadores más débiles, problemas de confianza, y muchos otros obstáculos siempre están a la vuelta de la esquina.
- Si te encuentras constantemente buscando otro entrenador, el problema seguramente no es el entrenador.
- Aun cuando logras optimizar todo, el éxito nunca está garantizado.
8. La experiencia competitiva debe ser divertida para ambos, tú y tu hijo/a. Si uno de los dos no se está divirtiendo, tienen un problema.
- Tu hijo/a debe estar mucho más motivado que tú.
Si tú te estás frustrando, imagínate lo que siente tu hijo/a.